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En estos días hemos estado preparándolas paredes para ponerles el recubrimiento que servirá como aislante térmico. Unas cuantas paredes podemos dejarlas como están, pero resanadas y lijadas antes de la pintura.

Después del desastre del yeso, así quedó la casa:

Y así quedamos nosotros:

Teníamos muchas ideas para la escalera, aunque al final decidimos dejar la existente pero quitar el barandal.

Un pequeño detalle que dio un gran cambio, y mucha amplitud visual. Después de esta idea (mi idea) prometieron confiar en mis decisiones de aquí en adelante :D

Llegó el material para el aislamiento, pero resulta que el camión de entrega no pasaba por la puerta principal y nos dejaron entonces todo el material en la entrada. 

Tuvimos que llevar las placas hacia la casa, una por una. Aquí las pilas de material con escala humana para darse una mejor idea de cuanto material era:

Como tres horas después, mucho cansancio, desesperación, hambre, sed, frío, calor, y una lámina quebrada, la casa quedó sin espacio pero ya con el material guardadito.

Seguiremos informando ;)

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Ya no cuento por semanas, porque han pasado algunas que pareciera que no avanzamos... Pero la casa tiene ya cuatro toneladas y media menos de peso entre escombro, muebles de cocina y baño viejos, puertas... Y un muro que no pensábamos romper, pero que tuvimos qué; es verdad que destruir también tiene su chiste, y aveces se nos puede pasar la mano.

Todo ese material lo llevamos a la "dechetterie", una especie de basurero municipal donde la gente lleva todos los desechos que no puedan separarse en la basura "normal" que pasa a las casas. Fue impresionante ver la cantidad de cosas que desechamos, algunas veces sin necesidad. 

Otras dos toneladas de material a meterse en la casa, pero ya tenemos piso ;)

También tenemos una nueva ventana, o bueno, el agujero donde estará la ventana, un pequeño muro divisorio, y muchas nuevas ideas.